domingo, 27 de mayo de 2012

Pacto Televisa-Peña Nieto



Por Alejandro C. Manjarrez
No hay gobernante que se haya negado a contratar a Televisa para difundir su imagen personal con el pretexto de promocionar la obra de su gobierno. Todos lo han hecho incluidos aquellos que hoy son enemigos de la televisora, llámense candidatos, líderes camerales o dirigentes partidistas.
Y tampoco hay televisora que pueda presumir de imparcial en la difusión de la imagen de cualquier gobernante. Menos aun si sus ejecutivos le echan ojo a quien para ellos tenga las características de un buen prospecto presidencial. Los unos y las otras actúan conforme a las reglas del marketing político, técnica que varios países –incluido el nuestro– importaron de los expertos estadunidenses en cuyo currículum –a partir de John F. Kennedy– aparecen todos los presidentes gringos y un montón de aspirantes al Senado y a la Cámara de Representantes. Se trata, pues, de una costumbre cuya ventaja podría ser la transparencia con que en el vecino país se manejan los recursos públicos y privados que se destinan a este objetivo político.
Si partimos de esa, digamos que tradición, no tendríamos por qué criticar a la dupla Peña Nieto-Televisa. Sin embargo, como la diferencia entre Estados Unidos y México estriba en que acá funciona lo que está considerado como un insultante monopolio televisivo, la sociedad ha empezado a molestarse con ese tipo de prácticas de propaganda que, hay que decirlo, también son el pan nuestro de cada día del gobierno panista.
Para las televisoras de México, ni Andrés Manuel López Obrador ni Josefina Vázquez Mota, reunían las características que buscan sus expertos en mercadotecnia política con tendencia comercial. El primero porque los despreció e incluso satanizó antes y después de la elección presidencial pasada. Y la segunda debido a que, dadas las normas del PAN, nadie imaginaba que una mujer de ese partido sería la candidata al máximo cargo de la nación.
Quizá por ello Televisa escogió a Enrique Peña Nieto, como el único prospecto presidencial con el carisma y la imagen que, según sus expertos, garantizarían lo que pudo haber sido una excelente inversión siempre y cuando no hubiese existido el costo beneficio que hoy critica López Obrador.
La estrategia de marras se conoció en el año 2004 cuando los ejecutivos del consorcio que maneja Emilio Azcárraga, acordaron impulsar al hoy candidato del PRI a la Presidencia de México.
Mi dicho se basa en lo que enseñaron, declararon y hasta presumieron a medio centenar de jóvenes desde Alejandro Soberón hasta René Asizz, Luis de Llano Macedo y Pedro Torres, todos relacionados con la televisora y además conferencistas del diplomado “Entretenimiento y Sociedad”, curso que, paradójicamente, se impartió en la Ibero, plantel Santa Fe.
En esas sesiones, el representante del CIE organismo filial de Televisa y por ende relacionado con Ocesahabló del proyecto político arropado por la televisora, mismo que consistía primero en hacer gobernador a Enrique Peña Nieto, que por aquellos entonces era candidato del PRI al gobierno del Estado de México, y después llevarlo hasta donde hoy se encuentra. Todo basado en la estrategia de mercadotecnia televisiva que esto no lo dijeron pero se intuye incluía la faceta rosa del personaje. La otra digamos que paradoja, se manifiesta con el patrocinio del diplomado a cargo de Banamex y la participación de Comex y American Express, empresas que aportaron a sus conferencistas de primer nivel, mismos que compartieron cátedra con Soberón, Asizz, De Llano y Torres.
Aparte de los efectos que surjan de las razonadas (o tal vez manipuladas, ya se verá después) protestas de los jóvenes contra Televisa y su cuerpo de informadores, lo interesante está en que necesariamente tendrá que desaparecer la costumbre de usar el dinero del pueblo para campañas televisivas cuyo único objetivo sea el de impulsar al político con aspiraciones de presidente. Y esto debería ser motivo de alarma y preocupación para los gobernadores que echaron toda su carne al asador de Emilio Azcárraga Jean, entre ellos Rafael Moreno Valle, sin duda.
Twitter: @replicaalex