domingo, 22 de abril de 2012

Las manos negras de Elba Esther Gordillo


Por Alejandro C. Manjarrez
Elba Esther Gordillo Morales es sin duda alguna quien propició el cambio o decadencia o renuevo del PRI. Esto porque la debacle y renacimiento de ese partido dio inicio cuando la maestra lo abandonó para ayudar a que el panista Felipe Calderón ganara la presidencia de México, valiéndose de trucos electoreros que parecían superados. Una vez cobradas sus cuotas, doña Elba Esther fortaleció su propio organismo político e hizo gobernadores a varios ex priistas, entre ellos a Rafael Moreno Valle.
Después de sus peripecias y conflictos librados en el poder político nacional, como por ejemplo el vilipendio en su contra (revelaciones del ex director del ISSSTE), la señora Gordillo Morales amenaza con regresar a su redil original cautivada por la presencia y posibilidades de Enrique Peña Nieto, el candidato que empezó a serlo cuando, a través de una de sus filiales, Televisa lo adoptó con el interés de llevarlo a ocupar la gubernatura del Estado de México, cargo desde el cual empezaron a crearle la imagen que hoy tiene, precisamente para convertirlo en el sucesor de Calderón Hinojosa.
Por esa y otras razones derivadas del ejercicio del poder, el Panal inició su nuevo ciclo trabajando y operando para dar votos a Peña Nieto, acciones validadas e incluso apoyadas por los mandatarios con el sello de la lideresa, marca que por cierto está grabada ad perpetuam.
Sirva lo anterior como punto de partida de esta y otras columnas relacionadas con la “democracia” que vivimos. Ahora va una de las historias engranadas en el actual proceso cuyo eje, como ya lo dije, se llama Elba Esther Gordillo Morales.
Candidatos por negociación
Antes de aceptar la postulación, varios de los candidatos que disputan la diputación federal y el escaño senatorial, recibieron el llamado de un importante funcionario morenovallista. “Queremos que compitas por equis distrito”, fue el primer canto de sirena que escucharon. Y el “aunque vas a perder”, la siguiente cantaleta que sirvió de preámbulo al compromiso-promesa sobre el futuro político-burocrático que espera a cada uno. Y el “no gastarás ni un centavo y además el tiempo y esfuerzo que dediques te serán debidamente retribuidos”, la ulterior tonadilla que seguramente les hizo sonreír y sentirse un poco menos traidores al PRI. Hubo incluso ofertas derivadas del “vas a perder” y las consabidas retribuciones para quienes, en vez del Panal, escogieran al PRI, siempre y cuando aceptaran adicionarse al proyecto presidencial 2018.
El primer paso o razón de esta estrategia es, como ya lo dije, beneficiar y colaborar para que el Partido Nueva Alianza conserve su registro y al mismo tiempo su lideresa moral (eufemismo éste parecido al de Gonzalo N. Santos) cumpla el compromiso pactado con Enrique Peña Nieto.
Voto diferenciado
A partir de esa estrategia que nada tiene de democrática puesto que representa –depende su punto de vista– la burda o fina manipulación del electorado, los gobernadores afiliados (entre ellos el poblano) garantizarán (dependiendo el éxito de la votación selectiva que proyectan) su sobrevivencia política. Esto a pesar de ser considerados desertores del PRI y por ende enemigos en las urnas, en algunos casos –como el de Puebla– con el célebre e histórico resultado electoral que conocemos.
Aunque perdiese la elección presidencial, Josefina Vázquez Mota podría quedar satisfecha y contenta con la estrategia de marras, ya que sus correligionarios ganarían varios de los distritos en disputa, los que históricamente han dado votos al PAN, los mismos en donde contienden las “mejores cartas” del Panal cuya función será quitarle votos a sus ex correligionarios priistas (para que la cuña apriete…). Qué mejor definición que la del “divide y vencerás…”, acto de poder cuyos derechos deberían pagarse a los descendientes de Maquiavelo.
Por su parte, los candidatos al Senado (cándidos, les dicen) tienen el mismo origen, causa y futuro de sus compañeros que aspiran a ser diputados federales: formar parte del proyecto 2018 que involucra a los amigos de Moreno Valle, y para ello contar con las retribuciones del caso.
Se trata, pues, de la sesuda estrategia política que muestra cómo se puede jugar y apostar en esta travesura diseñada para el beneficio, no de la sociedad sino de grupos políticos cuya estructura está sustentada sobre las columnas que representa el poder de Elba Esther Gordillo. El caso paradigmático lo tenemos en Puebla, precisamente, entidad en la cual se puso a funcionar el engranaje que, igual que su logotipo, tiene varios colores y facetas o máscaras, incluidas las que se necesitan para quedar bien con el PRI, con el PAN y con el Panal, tema éste que habremos de analizar.
Twitter: @replicaalex