Imagen de la película: All the President's Men - 1976
Por Alejandro C. Manjarrez
Mi columna “Los ‘plagios’ del gobernador” provocó cierto
malestar entre el grupo que se dedica a esparcir el perfume de la lisonja por
donde camina Rafael Moreno Valle Rosas. Unos la leyeron con ánimo crítico y
otros lo hicieron por partes, razón por la cual no entendieron la ironía en los
comentarios del columnista. Y que conste que éstos no fueron como la sátira
aquella que hiere como un ramo de rosas, estilo que distinguió al poeta y
humorista cervantino de origen poblano, Manuel Pérez Salazar y Venegas.
Dije al inicio de la entrega anterior:
“Si las frases políticas estuvieran sujetas a derechos de autor
(copyright), Rafael Moreno Valle
Rosas tendría sendas demandas por plagio. Y éste, avergonzado y montado en
cólera, seguramente y con razón estaría pasándole las facturas a los genios de
marketing que contrató para promover su imagen. ¿Cómo? Pues con terribles y altisonantes
humillaciones, además del cese ipso facto después, claro, del certero
celularazo en la chambona cabezota del plagiario primitivo (espero que
no lleve el nombre de Marcelo).”
Como el lector sabe, los discursos elaborados por el propio
emisor o los que manda a redactar ya sea por falta de tiempo, vocabulario,
ideología o preparación, llevan una carga de conceptos nada originales debido a
que el hilo negro discursivo existe desde la época de los clásicos griegos. Lo
mismo pasa con las frases de campaña, criterio éste que (doy un brinco
histórico generacional) expresó Eulalio Ferrer en su libro “De la lucha de
clases, a la lucha de frases”. Diría la abuela de quién usted quiera y mande:
“el agua caliente existe desde endenantes”.
La definición de plagio, como bien lo sabe el
lector (la copio de Wikipedia porque es la digamos que universal) establece que
“desde el punto de vista legal es una infracción al derecho de autor acerca de una obra artística o intelectual de
cualquier tipo, en la que se incurre cuando se presenta una obra ajena como
propia u original. Así pues, una persona comete plagio si copia o imita algo
que no le pertenece y se hace pasar por el (la) autor(a) de ello. En el caso de documentos escritos, por ejemplo, se tipifica
este delito cuando, sin uso de comillas o sin indicar explícitamente el origen,
ni citar la fuente original de la información, se incluye una idea, un párrafo
o una frase ajenos.”
En el caso de la frase “lo mejor está por venir”
no hay un creativo original ya que forma parte de escritos bíblicos e incluso literarios
y también de una que otra canción. De ahí que haya entrecomillado la palabra
“plagio”.
Entre los “creativos” del marketing político que
se aprovechan de la falta de información de sus clientes, resulta un hecho
común el “fusil” descarado. Lo interesante o digno de aplauso es cuando, por
ejemplo, con el bagaje que contiene el libro de Ferrer, elaboran frases
novedosas, inteligentes o con una carga poética como la que pusieron de moda
Barack Obama y Jon Favreau, su ghost writer. La novedad a que me
refiero es que las palabras encajen en la originalidad, no tanto de la frase o
mensaje sino la del momento y en el contexto en que se utilizan.
Aparte de Obama y Moreno Valle (vea usted cómo soy
irónico al ponerlos al mismo nivel), la frase en cuestión ha sido usada por
varios personajes, poetas, escritores, autores de rolas e incluso guionistas
cinematográficos. Tres ejemplos:
Robert Bowning, poeta del siglo XIX que escribió: “Ven,
¡Envejece junto a mí!/ Lo mejor aún está por venir…”
Frank Sinatra, la voz, popularizó la frase con la canción
que así se llama: The best is yet to come. Puede
escucharla en: http://bit.ly/UCgUyL
También hay otra canción que se llama igual. La interpretan los
Scorpions. Esta es la liga: http://bit.ly/ZbBDiy
Por eso y otras cosas que me reservo dije que el
gobernador está obligado a exhibir a su ghost
writer y, además, a jalarle las orejotas de burro por plagiar la
oratoria del hombre más popular del mundo (ojo, el plagiario es su “escritor
fantasma”). O para que no haya duda del ingenio y talento del equipo (he aquí
la ironía) que forma parte de su staff
o tanque de cerebros (a lo mejor son genios fantasmas), demandar a Barack por
haberse fusilado las frases que llevan el copyright
morenovallista.
Bueno también entran en ese equipo los hombres del gobernador
que, permítame el ejemplo del escándalo Watergate hecho película, podrían
embarrarlo con la boñiga que producen. Digo…
Twitter: @replicaalex